jueves, 1 de agosto de 2013

Día Internacional de la No Violencia contra la Mujer

 

Conferencia presentada en el Auditorio Margarito Ledesma, en Comonfort, Gto. El día 30 de nov. de 2006.

Quiero empezar este trabajo con la siguiente frase: Woman is the Níger of the World, la mujer es el negro del mundo, tomada de una canción de Johnn Lennon. En ésta frase el cantante inglés denuncia la forma en que la mujer es tratada, como una esclava al servicio del más fuerte o en el peor de los casos como un objeto.

Desde 1981 los militantes a favor del derecho de la mujer observan el 25 de noviembre como el día contra la violencia. La fecha elegida no puede ser sino en conmemoración del brutal asesinato de las tres hermanas Mirabal, llamadas las “mariposas inolvidables”, hecho sucedido en la República Dominicana en la década de los sesentas.

La razón de por que acudir al llamado de esta conferencia descansa principalmente en ser originario de la CD de Chihuahua, y su frontera CD Juárez se convierte en ejemplo de cómo la mujer puede ser blanco perfecto de la violencia y la impunidad con la que día con día se comenten asesinatos dirigidos principalmente hacia ellas: Las mujeres. Y para no ir tan lejos, aquí en Comonfort los casos de violencia que día con día llegan a mi consultorio.

Pero para hablar el mismo idioma vamos a distinguir algunos tipos de violencia en contra de la mujer que se cometen desde el mismo seno materno hasta la vejez.

Una de las primeras formas de violencia se ejercen en contra de los no nacidos, es decir cuando la mujer embarazada se da cuenta de que en su vientre se esta gestando una niña, puede ser motivo para que la presión del padre e incluso de la misma madre se ejerza un aborto selectivo. Un aborto selectivo es aquel donde sabiendo que el bebe es una niña, el padre o la madre por presión del esposo o la familia accede a no tener esa niña ya que por ser mujer no servirá como fuerza de trabajo, no podrá continuar un apellido o sólo servirá para casarse, lo que implica un gasto. De igual manera sucede con la niña recién nacida la cual se convertirá en una calamidad y será el lugar donde se descargarán los golpes, el hambre y el odio por el solo hecho de ser mujer. Lo anterior se convierte en una de las formas más detestables de violencia y de odio contra alguien que ni siquiera se encuentra en condiciones no digamos de defenderse sino de por lo menos entender el hecho.

En la infancia y en la niñez la violencia en contra de la mujer toma otros matices, pues nos encontramos con el matrimonio infantil, la mutilación genital femenina, el abuso físico, sexual y psicológico, el incesto, la prostitución infantil y la pornografía.

La adolescencia no esta ajena de la violencia, se podría decir que es el momento en el que se gestan las más diversas formas de violencia, que pueden comenzar en el noviazgo y para muestra tenemos: sexo forzado por razones económicas.
Tenemos también adolescentes estudiantes que son obligadas a tener relaciones con maestros a cambio de favores, el incesto, el abuso sexual en el trabajo, violaciones, acoso sexual, prostitución y pornografía forzada, la trata de mujeres, violencia conyugal, abuso y homicidio, abuso psicológico, abuso de mujeres discapacitadas, embarazos forzados, etc.

La etapa de la vejez no escapa a la violencia: suicidios forzados u homicidios de viudas por razones económicas, del cual tenemos el caso reciente y muy sonado de la mata viejitas en la cd de México, el abuso físico, sexual y psicológico.

Lo que más debe preocuparnos es desde donde viene ésta violencia y sus razones para no denunciarla y prevenir que sucedan. Muchas veces la violencia hacia la mujer se convierte en un secreto familiar, el incesto en el que un hermano abusa de su hermana, o de un padre que abusa de su propia hija y que por cuestiones sociales son obligadas a callar y a soportar el abuso por años.
También la escuela y el trabajo se convierten en lugares comunes para ejercer esa sutil violencia, en la que por medio del abuso de su autoridad un maestro condiciona una calificación, o un jefe presiona a su empleada para que acosta de un ascenso o de que permanezca en su trabajo acceda a favores sexuales.

Son situaciones tan comunes que ya ni siquiera nos molestamos en verlas o tomarlas como graves. Pareciera que este tipo de situaciones sólo pasan en la televisión o si le pasan a la vecina, a mi no me importan y no hacemos nada por evitar o prevenir estos hechos.

No es necesario ver moretones o golpes para saber que la violencia existe. Hoy sabemos que los golpes son sólo una de sus formas, la palabra, las amenazas, la prohibición de la libertad, la prohibición de ver a los familiares, la prohibición de ver o saludar amigos o amigas son manifestaciones tan comunes de la violencia que se ejerce día con día en contra de la mujer.

Aunque no es el único grupo marginado que sufre de violencia, si es de los que más lo sufre y con las peores consecuencias. Este grupo no denuncia por las más diversas razones, desde su propia condición, por que soy mujer y nadie me va a creer o a escuchar, desde lo social, que van a pensar de mí, que yo lo provoque, que yo lo permití y pasando por las propias leyes.

Otra causa grave que motiva este silencio es el miedo. El miedo a ser más lastimada, a ser señalada, a no ser escuchada, a ser manipulada; un miedo profundo que pesa y que aún hoy sigue siendo un lastre.

La violencia en contra de la mujer nos involucra a todos, el poder hablar de ello, poder denunciarlo, como el día de hoy es un buen comienzo. Y repito no se trata solamente un asunto de mujeres, nuestro papel como prójimo es necesario para denunciar, concientizar, escuchar y atender a ésta problemática

Desde quien ejerce la violencia, quien la mira, quien la escucha, quien la sabe y quien la recibe se encuentran involucrados en una de las peores problemáticas de nuestro siglo.

Que el 25 de noviembre se convierta en un motivo de reflexión y preguntarnos desde el lugar de hermano, padre, maestro, servidor público, sacerdote: Qué puedo hacer yo para evitar la violencia en contra de las mujeres, de nuestras mujeres.

Quiero terminar mi participación el día de hoy con una excelente reflexión del pastor alemán Martín Niemoller:

“Primero vinieron a buscar a los comunistas
y no dije nada porque yo no era comunista.
Luego vinieron por los sindicalistas
Y no dije nada porque yo no era sindicalista.
Luego vinieron por los católicos
Y yo no dije nada por que yo era protestante
Luego vinieron por mí pero, para entonces,
Ya no quedaba nadie que dijera nada


Y ojalá que cuando queramos denunciar aún se pueda hacer algo por nosotros.

martes, 2 de julio de 2013

Feliz día del padre

Feliz día del Padre


¿Cómo hablar de la paternidad, cuándo no se ha sido padre? Me podrán decir, y no sin justa razón. Pero aún así, puedo hablar desde un ángulo del que es posible no todos puedan hablar, desde la subjetividad de ser hijo. Si, pues no siendo padre aún, a mis treinta años puedo decir lo que es un padre. Padre es el que está ahí, y no solamente en presencia física, de la mano con la figura de autoridad, aunque no siempre. Desde mi manera de ver difícilmente a como lo muestran los medios de comunicación por lo menos en los primeros años de vida, amigo no es, se es Padre. Figura emblemática y simbólica por excelencia, pues no olvidemos que para muchas religiones el Dios supremo es engendrador y padre. Presencia omnipotente, omnipresente, que todo lo puede, no es acaso la mirada del pequeño hijo. Enloquecedor para unos, indispensable para otros. La paternidad una cuestión de rigurosa fe. Si, hablar de la paternidad, pero entenderla?, hasta que se es Padre?. Investidura de Rey, que acaso pueda ceder lugar cuando un hijo logra dicha posición. “Muera el Rey, viva el Rey” Su muerte como alguien del siglo pasado proponía, su muerte no hace más que imponer su ley en nuestras vidas. Como no entender nuestras vidas sin esa influencia, que nos marca, de por vida. Aun esa ausencia para los que sufren y viven la orfandad  es definitiva.
Ausencia o no del padre, se vive y se sufre con éste significante. Doloroso para un padre sobrevivir a la muerte de un hijo. Para un hijo la muerte del viejo, que significará?, como se arrastran dolores de este tipo?.

Pequeña reflexión dedicada para los que son padres y en especial para mi padre, y también por que no, para mi a quien aún aguarda la paternidad y que como suele decir el dicho popular, al que Dios no le da hijos, el diablo le da sobrinos....

Alfredo Terrazas Lara
Estado de México
A 15 de Junio del 2003. 

El movimiento psicoanalítco como un retorno al humanismo



El movimiento psicoanalítico como un retorno al humanismo

Antecedentes

Hablar de los orígenes del movimiento psicoanalítico lleva impreso de forma imborrable el sello de distintas influencias, que sería difícil pasar por alto. Y me refiero a las primeras influencias que recibió Freud durante y posteriores a sus estudios de medicina.

En 1885, mediante una beca de estudios, Freud viaja a París donde conoce a Jean-Martín Charcot con quien asiste a sus presentaciones en la Salpetriere, donde aprendió de quien diagnosticó con claridad la histeria como una verdadera dolencia y de quien utilizaba ampliamente la sugestión hipnótica para su curación.

Freud puede ver que la clínica de Charcot se postula en términos de observación más que en términos de saber. A Charcot no le interesaba hilvanar teorías, para él es la mirada la que organiza la realidad. El método de Charcot es descriptivo, contra este inmovilismo contemplativo, Freud toma el partido de los exploradores, no se conforma con aprender a ver, piensa, hace falta ir a ver.

Para el año de 1886 Freud se instala como médico en Viena, su arsenal terapéutico se reduce a la electroterapia y la hipnosis. No tarda en abandonar la primera, al darse cuenta de que el éxito del tratamiento eléctrico reside en la pura sugestión. Entonces llega a oídos de Freud la noticia de que en Nancy existe una escuela que utiliza la sugestión, con o sin hipnosis, con fines terapéuticos.
En 1889 decide perfeccionar su formación en la técnica hipnótica y viaja a Nancy: Allí estudia el trabajo de Liébault con mujeres y niños del pueblo y las experiencias de Bernheim con pacientes histéricos de su hospital. Junto a éste, descubre la importancia que tiene, en presencia de fenómenos histéricos, tomar en cuenta la relación médico paciente.






En 1882, tres años antes del encuentro de Freud con Charcot, Breuer consulta a Freud con respecto a una paciente, Bertha Pappenheim (el caso de Anna O, de Estudios sobre la histeria). La descripción del caso lo impresiona. Anna O., joven lúcida e inteligente, cuida con devoción a su padre gravemente enfermo. Un día deja de alimentarse, al punto que le prohíben continuar atendiendo a su padre. Aparecen fuertes ataques de tos (que remedan la enfermedad del padre), seguidos de otros síntomas: estrabismo, parálisis del cuello, cefaleas, mutismo histérico y olvido de la lengua materna. Surgen por último alucinaciones en las que aparecen serpientes. El comportamiento de la joven se hace violento, se desgarra la ropa, etc.
El 5 de Abril de 1881, el padre muere. La joven sufre trastornos visuales y se agrava su anorexia. Breuer pasa muchas horas del día con la paciente y le da de comer personalmente, al punto que Anna O. Sólo acepta los alimentos que él le ofrece. Breuer utiliza entonces la hipnosis, con la idea de hacer que su paciente hable, que relate sus fantasmas y, en consecuencia, el comienzo de sus síntomas. Estos desaparecen bruscamente. Es el descubrimiento del método catártico. Según este método la sola verbalización del conflicto y de las situaciones conectadas con la aparición del síntoma resultaba eficaz para que, aunque temporalmente, los síntomas desaparecían. Los eventos que se desencadenaron después de varios meses de trabajo hipnótico, en que el hablar mejoraba la sintomatología de la paciente, fueron descritos por ella como “la cura de la limpieza de chimenea” o “la cura por la palabra”.

La esposa de Breuer comienza a sentir celos de esta paciente, que por las características de su sintomatología, ocupa un lugar de privilegio en la atención de su marido.

Este elemento transferencial (advertido por la señora de Breuer, aunque ocultado por su marido) intimida tanto a  Breuer, que éste decide salir de viaje inmediatamente con su mujer. Anna vuelve a llamarlo a mitad de la noche porque sufre cólicos abdominales.
  
Breuer presencia una especie de alumbramiento histérico, durante el cual la paciente deja escapar las siguientes palabras: “Está llegando el hijo que tengo del Dr. Breuer”. Éste aterrado, parte enseguida a Venecia, donde engendrará una pequeña Breuer.  Después de la interrupción del tratamiento, Breuer declara curada a Anna O. Aunque la paciente no haya estado realmente “curada”. La huida de Breuer llama la atención de Freud. Breuer no repuesto de sus emociones en que se contempla la publicación de Estudios sobre la histeria, desea que el problema del amor de transferencia sea revelado al mundo. Evidentemente, descubrir el deseo sexual de Anna O. Por él atemoriza a Breuer, porque a la vez saca a la luz su propio deseo por la paciente (idea que él rechaza). En el caso de Anna O. Estaba ya latente, en espera de su ulterior desarrollo conceptual y técnico, el instrumento constituido por la transferencia y la contra transferencia.

Un segundo descubrimiento del psicoanálisis deriva del caso del la Srita. Elizabeth Von. R., descrito por Freud. Esta joven mujer de 24 años caminaba con la parte superior de su cuerpo inclinado hacia delante y no hacía uso de ningún soporte. Sufría dolores mal definidos en la cara anterior de los muslos, donde su piel era hiperalgésica. Al igual que Anna O., Elizabeth era inteligente, había perdido al padre y su caso se diagnostico como histeria. La aplicación del método catártico mediante la inducción hipnótica parecía el modo más eficaz de ayudar a la paciente en la producción de relatos, palabras e información. Una primera circunstancia afortunada resultaba de que ni Freud era buen hipnotista, ni Elizabeth era fácil de hipnotizar. Por tanto Freud utilizó el recurso de hacer presión con sus manos sobre la frente de la paciente, mientras ella estaba tendida en el diván, insistiendo reiteradamente en que evocara las situaciones y circunstancias relacionadas con los síntomas que la aquejaban, así como las situaciones traumáticas con ellos relacionados. El resultado fue un fluir de las ideas, palabras, pensamientos, en una palabra, el discurso, que no sólo cumplía la función terapéutica de la catarsis, sino también descubría al Freud investigador, los estratos debajo de la conciencia, aquellos que estaban más directamente relacionados con la producción de síntomas. Se descubrió que el dolor que Elizabeth sufría en los muslos, se localizaba precisamente en el lugar donde su padre apoyaba sus pies cuando estaba enfermo y ella lo cuidab
 Asimismo se fue haciendo evidente que la paciente se reprochaba gravemente el haber albergado el secreto deseo de muerte de su padre con el objeto de adquirir su libertad. Se descubrió también la envidia y la rivalidad hacia su propia hermana que había podido contraer matrimonio con el hombre hacia quien Elizabeth sentía una tierna atracción.
La tolerancia de la paciente a la aparición en su conciencia de lo que habían sido deseos, sentimientos y pensamientos, relegados hasta entonces fuera de ese campo, propiciaron la desaparición de los síntomas. Simultáneamente, Freud se percataba de la nueva perspectiva ante la que se hallaba y sin duda de la inmensa importancia del inconsciente, ese nuevo espacio mental que se encontraba frente a él, y de las leyes aún ocultas que lo regían.
Elizabeth Von. R. Es también en otra afortunada circunstancia, quien ofreció a Freud la oportunidad de descubrir la llamada asociación libre y su enorme valor técnico al favorecer el acceso al inconsciente. Sucedió así: algunas ideas clave, que iluminaban la comprensión dinámica de los síntomas, eran obtenidas tras larga insistencia de Freud y presión de sus manos sobre la frente de la paciente. La insistencia verbal de Freud, se enfrentó a una reflexión por parte de ella, justo cuando él había logrado la pieza de su rompecabezas: “ Me hubiera dicho que esto era lo que quería saber. Yo ya lo había pensado varias veces, pero Usted me interrumpía con su presión y sus palabras”.
Freud decidió entonces dejar a un lado toda presión y recomendó a su paciente decir, simplemente todo aquello que apareciera en su mente, sin importar orden ni sentido. Este es el origen de la aplicación de la asociación libre en psicoanálisis.
El método catártico y el de la asociación libre fueron los procedimientos terapéuticos más tempranos en la historia del psicoanálisis.  
 
Ahora si Ustedes me lo permiten quiero regresar al titulo de esta conferencia: El movimiento psicoanalítico como un retorno al humanismo. Freud tenía una formación médico neurológica, donde se privilegiaba lo fisiológico para explicar los fenómenos orgánicos, pero supo atraerse a la psiquiatría dinámica en la que el hipnotismo sugería la entrada a áreas desconocidas de la mente.
La intuición integrativa de Freud, logró la fusión de las corrientes ideológicas derivadas del humanismo clásico, Helénico. Por lo que los postulados freudianos se sustentan en una visión integrada del hombre, en la que el hombre es mente y cuerpo, familia y sociedad, interacción objetal y relación con su cuerpo; poseedor de un mundo objetal interno y está inmerso en un medio social y cultural; nace y crece en un espacio donde la fantasía y la realidad, la mente y el cuerpo interactúan y se influencian permanentemente.
 

domingo, 30 de junio de 2013

El temor no es real



Posterior a una averia y el accidente de su nave se estrellan contra la el planeta tierra que se encuentra en cuarentena y sin vida humana.
General Cypher Raige a su hijo Kitai: Si vamos a sobrevivir tienes que recordar que el temor no es real..
Es el resultado de tus pensamientos.
No me malinterpretes, el peligro es muy real.
Pero el temor es una elección.

De la disimulación honesta

Se simula lo que no es, se disimula lo que es. Disimular a partir de un gesto, del arte de las señas, sin ruido, en silencio, callando a tiempo. El artificio de la disimulación, que anuda el tolerar, callar y esperar, consiste en no hacer ver las cosas como son. No es un engaño sino un descanso honesto, un moderado olvido, una pausa que se da a una idea o a la verdad antes de que se haga evidente, para mostrarla a su tiempo, cuando le llegue su momento. Sin embargo puede naufragar a consecuencia de la soberbia, la ira y la voluntad de poder, que se apoya en el engaño. El secretario Accetto, quien escribió en el lugar de y para otro, puso a funcionar este artificio para pautar ese pasaje. No se refiere a una cuestión de comunicación sino de goce. Lo que se trama entre un sujeto ya fuese príncipe, loco, místico o incluso analizante y quien es convocado a ese lugar de secretario le concierne al psicoanalista. Prólogo por María Cecilia Jáuregui Lorda para el texto: De la disimulación honesta de Torquatto Accetto colección libros artefacto.

Sólo los muertos....

Solo los muertos han visto el final de la guerra. Platón (427 a. C. – 347 a. C.)

Amor es nostalgia



Una imagen de Remedios Varo que inevitablemente hace referencia al desamor y como cita Freud en lo Ominoso «Amor es nostalgia», se dice en broma, y cuando el soñante, todavía en sueños, piensa acerca de un lugar o de un paisaje: «Me es familiar, ya una vez estuve ahí», hace referenca a lo familiar lo antigûo y que llega a ser terrorífico.....

Una pareja se separa, cada uno siguiendo el recorrido de su camino personal. Mas, los dos caminos son extrañamente similares; casi espejo uno del otro. Evidentemente, la pareja se ha despedido. El gato nos mira curiosamente. ¿Triste, asustado, inquisitivo? Una luz extraña recibe los dos individuos.

Las sombras (¿las almas?) se quedaron atrás, bailoteando, flotando lánguidamente, atraídas una por la otra. Las sombras se acercan, los rostros casi tocándose, sus labios al alcance… Pero no se besan. Como si algo los estuviera deteniendo. ¿Su propia terquedad? ¿El destino? El gato gris nos mira como si fuera un símbolo, como si quisiera indicarnos lo que se esconde a la vuelta de la esquina (¿mala suerte o buena fortuna?) Pero el gato no habla. Solo nos mira.

Y la pareja sigue su rumbo, sin saber lo que hay adelante, solo lo que dejaron atrás.